miércoles, 16 de mayo de 2018

EL FARO DEL SILENCIO


EL FARO DEL SILENCIO
IBON MARTÍN
EDITORIAL TRAVEL BUG

EL AUTOR


Periodista español, Ibon Martín cursó estudios de Comunicación y Periodismo en la Universidad del País Vasco. Tras licenciarse, pasó a trabajar para varios medios de carácter local, labor que combinó con una de sus más grandes pasiones: viajar.
Desde hace unos años se ha dedicado a completar varios libros de viajes y rutas por Euskal Herria, siendo uno de los grandes expertos en turismo rural y ocio de todo el País Vasco. Sus libros abordan descubrir zonas poco abiertas al turismo a través de varias perspectivas, como puede ser viajar en coche o de pueblo en pueblo. Varios de sus libros han sido escritos en colaboración con Álvaro Muñoz.
Dentro de la narrativa, Martín ha probado suerte con la novela en varias ocasiones, siendo conocido por novelas como El faro del silencio, El valle sin nombre, El último aquelarre, La fábrica de las sombras, y la última, La jaula de sal, ambientadas siempre en unos entornos naturales muy sugerentes y cargados de mitos y leyendas vascas.

SINOPSIS


Una tarde de otoño, la noche llama a las puertas de un remoto faro de la costa vasca, el cuerpo de una mujer aparece a los pies de la torre de luz. El asesino se ha llevado la grasa de su abdomen. Leire, la escritora bilbaína que ha encontrado el cadáver, se convierte en la principal sospechosa. Desesperada, se verá obligada a iniciar una inquietante investigación que sacará a la luz intrigas familiares y conspiraciones económicas. Sus pasos, que avanzan con más decisión que las pesquisas oficiales, no tardarán en desvelarle que está ante un imitador del Sacamantecas, al brutal asesino en serie que aterrorizó Vitoria en el siglo XIX.

Pasaia, una población dividida por la pretendida construcción de una nueva dársena, es el escenario de estas páginas. Tras su apariencia de apacible pueblo pesquero, se oculta un puerto industrial en decadencia, en el que algunos habitantes guardan una oscura verdad.

Con personajes caracterizados con esmero y una fascinante ambientación, Ibón Martín mantiene al lector en vilo hasta la última página de una escalofriante historia que deja al descubierto las debilidades del alma humana.


IMPRESIONES

Me decidí a leer a este autor, y concretamente su saga de la detective Leire Antuna, por la fama de buen novelista que ha cosechado en estas cuatro entregas. Además me llamaban mucho la atención los escenarios en los que se desarrolla la novela.

Yo que soy una enamorada de Euskadi y de la fuerza de la naturaleza de toda la costa vasca, de sus tradiciones y de sus gentes, he reconocido como auténticas todas las estas sensaciones y paisajes, desde Cabo Machichaco  a Biarritz, lo que me ha aportado un punto adicional a la lectura muy agradable.

La lluvia incesante,  el mal tiempo, veo una pasión un poco excesiva por los fenómenos meteorológicos de la costa cantábrica, como si todo lo malo llegase siempre con las tormentas y todo lo bueno apareciese con la calma. Quizás le falte a la novela algún destello de sol, pero creo que el autor lo ha hecho así para utilizarlo como un recurso literario  más, para que nos veamos envueltos en esa atmósfera de crímenes oscuros y sin sentido.

La protagonista, una escritora que acaba de divorciase y que vive en un faro en el municipio de Pasaia, Guipuzkoa (el pueblo es real, y el faro donde vive también), se enfrentará a una serie de asesinatos y misterios que tiene  que ver con el pasado de algunos habitantes del pueblo en una época determinada de nuestros años 80, donde la droga corría a raudales y era introducida por la costa cantábrica, hasta verse abocada en una vorágine de acusaciones infundadas y aventuras para descubrir al asesino, que a punto está de costarle la vida.

La personalidad de Leire me gusta mucho. El autor ha creado a una mujer fuerte, con carácter, luchadora (rema en una trainera y se siente objeto de una gran injustica social), y sin embargo ahí está al pie del cañón defendiendo su postura y tratando de dar con el culpable.

Me gustó mucho en concreto la referencia que hace al astillero que existe en Pasaia donde se hacen reproducciones de barcos antiguos de madera construidos de forma artesanal y tradicional. Me pareció un guiño a la zona y las tradiciones vascas muy bonito.

Tanto el estilo como el lenguaje no es el típico de una novela negra al uso, es una prosa cuidada, con unas descripciones muy visuales y fantásticas, y a la vez resulta ligera, rápida y entretenida, con un desenlace lleno de acción bastante intenso.

La novela quizás (por ponerle un pero) es un poco redundante en algunos aspectos, es como si estuvieras leyendo el mismo pasaje en varias ocasiones.

     En general ha parecido una novela negra de las “muy buenas”, por lo que la considero muy recomendable.

5 comentarios:

  1. Lleva tiempo este libro en mi pila de pendientes. A ver cuándo me animo.
    Besotes!!!

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  2. La historia está muy bien, y los escenarios son de película. País Vasco en estado puro.

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  3. Pues deseando leerla. Me gustaría mucho la ambientación.

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